El Centro Humboldt en las COP, de la acción local a la incidencia global: “A pesar de los desafíos hay avances en políticas climáticas”
Es el último trimestre del año 2021. Se aproxima la vigésima sexta Conferencia de las Partes (COP26), el evento global anual sobre cambio climático. En el Centro Humboldt en Managua, Víctor, Xitlali y Alejandro están listos para el viaje a Glasgow, Reino Unido, la sede de este importante acontecimiento. Ellos son parte de la delegación regional integrada por organizaciones de la sociedad civil de los países centroamericanos que participará como observadora en las negociaciones climáticas.
Pese al contexto adverso dado por la pandemia y lo incierto de los resultados que podrían derivarse de la COP26, después de un impase de dos años y de posposición de compromisos, el entusiasmo y las expectativas de Víctor, Xitlali y Alejandro son grandes, también hay sentimientos encontrados, pero al final, como dice el viejo adagio, la esperanza es lo último que se pierde.
Lo descrito anteriormente es lo que experimentaron a las puertas de la COP26, Víctor Campos, director ejecutivo del Centro Humboldt, Xitlali Sandino, subdirectora, y Alejandro Alemán, Oficial de Cambio Climático de la misma institución. Pero detrás de este momento previo al viaje, hay un intenso trabajo que involucra a muchas más personas comprometidas con la causa climática. Víctor, Xitlali y Alejandro, relatan sus experiencias, puntos de vista, vivencias, frustraciones, pero también sus satisfacciones.
Víctor Campos: “El cambio climático es un tema de supremo interés”

Víctor Campos, director ejecutivo del Centro Humboldt
Víctor Campos, quien ha participado en alrededor de 10 COP, explica el trabajo que se realiza cada año desde el Centro Humboldt de cara a este evento global. Es un proceso de debate, análisis, recopilación de datos, información y toma de decisiones en torno a los impactos del cambio climático en Nicaragua, en el que participan 26 organizaciones de sociedad civil, lo que ha sido posible en buena medida, gracias al apoyo técnico y financiero de la Agencia Católica Irlandesa de Cooperación al Desarrollo, Trócaire.
“Nosotros propusimos una metodología que fue adoptada por esas 26 organizaciones” afirma Víctor. Señala que cada organización ha conformado redes en los territorios donde trabajan en las que se involucran familias rurales. “A nivel territorial se hacen reuniones donde la gente habla e intercambia, porque el cambio climático es un tema de supremo interés en la actualidad” asegura Víctor. Explica que para recabar la información se han incorporado aplicaciones digitales y son los jóvenes quienes las están usando: “Hay una red de observación climática y comparten esa información ahora con medios tecnológicos y la juventud es la más interesada porque como es por una App, los menos diestros tecnológicamente en el hogar somos los adultos”.
La información es enviada al Centro Humboldt desde donde se analiza y se devuelve, “nos mandan la información, nosotros la procesamos y la regresamos con recomendaciones, además le pasamos información en tiempo real de cómo estamos con las mismas estaciones que ellos nos reportan” explica Víctor. Todo lo anterior es fundamental para la toma de decisiones y prepararse de cara a las COP anuales.
Pero el proceso previo al evento global no concluye ahí. Víctor explica que se realizan varios encuentros territoriales para el debate alrededor de temas conexos al clima. “El año pasado hicimos cinco foros territoriales, ahí hablamos de todo lo que tiene que ver con clima, hay prioridad de temáticas: gestión de riesgo, energía, agua, los ODS relacionados al cambio climático, biodiversidad y por una particularidad del extractivismo en América Central, son seis temas de los que se analiza información en los territorios” expone.
Víctor explica que esa información procesada luego se comparte en un foro anual que se realiza a nivel centroamericano. “Cada país lleva su planteamiento nacional. Hay mesas de trabajo, discusiones, y del evento centroamericano sale un documento que es el que vamos a usar para la incidencia en la COP y en todos los espacios regionales y nacionales”.
“Es una experiencia novedosa a nivel internacional. No ha sido fácil porque se maneja bastante gente, bastante opiniones encontradas, pero se han sabido administrar, yo creo que ha salido bien” expresa con satisfacción Víctor.
Alejandro Alemán: “Hay que actuar localmente, pero pensando globalmente”

Alejandro Alemán, Oficial de Cambio Climático del Centro Humboldt
Alejandro Alemán, además de fungir como Oficial de Cambio Climático del Centro Humboldt, es Coordinador de Climate Action Network (CAN) en América Latina, lo que representa un privilegio para Nicaragua y la región dado que CAN, con sede en Alemania, es una de las redes más influyentes de sociedad civil en los foros de las Naciones Unidas.
Apoyo de Trócaire es determinante
“Estamos conscientes que tenemos grandes desafíos en la agenda climática, el planeta se encuentra en una crisis climática sin precedentes” advierte Alejandro. “Para nosotros es fundamental el apoyo de Trócaire en nuestra participación en la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático” agrega.
Alejando afirma que: “Hay un amplio camino que recorrer hacia delante, pero si vemos hacia atrás, la verdad es que hemos avanzado, y sin Trócaire eso no hubiera sido posible, y no es únicamente el apoyo técnico y financiero, sino también la posibilidad de tener a través de Trócaire, acceso a otros contactos en sus espacios, en sus países.”
Lo más positivo
Los más positivo que identifica Alejandro de la participación regional en la COP, es que se ha logrado la incorporación del tema de pérdidas y daños, “la gestión de las pérdidas y daños asociadas al cambio climático, la visibilidad y el nivel de prioridad que se le ha dado a la gestión de los desafíos del Corredor Seco de Centroamérica, no hubiera sido posible sin los aportes de las organizaciones de la sociedad civil” asegura.
Aunque también advierte que “para los gobiernos es muy difícil que la sociedad civil; que el campesino y el indígena, hablen en una conferencia de la ONU, y digan tenemos este y este problema. Para los gobiernos es muy bochornoso decir eso no me concierne, de algún modo la acción articulada de la sociedad civil, moralmente los obligan a asumir ese tipo de tema y aunque sean incómodos.”
Alejandro refiere que “si bien es cierto, estamos acostumbrados a que no siempre se logra lo que quisiéramos, ha habido pasos importantes y cambios fundamentales”, añade que: “Cuando empezamos a ir a la COP, no pasábamos de 10 organizaciones latinoamericanas, hoy participamos por lo menos 35 organizaciones y hablamos con más fuerza, hay presencia de casi todo el continente y podemos generar una agenda articulada en relación a las agendas de los pueblos y comunidades de todo el continente”.
Para concluir refiere que “a pesar de los desafíos hay avances importantes en materia de políticas climáticas”, al respecto agrega: “Si bien es cierto, tenemos más de 26 años discutiendo la agenda climática en Naciones Unidas, los principales desafíos están en la acción local, lo que lleva a la necesidad de que como sociedades y como individuos empecemos a cambiar nuestros patrones de conducta en relación al clima”.
Xitlali Sandino: “La COP es una representación de la humanidad”

Xitlali Sandino, Subdirectora Ejecutiva del Centro Humboldt
Xitlali Sandino, subdirectora del Centro Humboldt cuenta que la COP26 fue la primera en la que participó de manera presencial. Refiere que fue una experiencia llena de emociones y frustraciones, pero también de satisfacciones, “fue algo abrumador” admite.
“Son dos semanas de un trabajo intenso donde prácticamente no hay tiempo para dormir” relata a la vez que describe la COP como “la mejor expresión de la Torre de Babel, está ahí gente de todo el mundo, gente de gobierno, de sociedad civil, pueblos indígenas, está la academia, están los jóvenes que ahora tienen más espacio; cada vez han ido involucrándose otros grupos de personas que dan una visión más diversa de lo que es en el planeta”.
Sobre las frustraciones resalta las contradicciones existentes dadas por los diferentes intereses económicos entre los países ricos que causan el mayor daño ambiental y los países pobres que sufrimos las consecuencias, intereses que inciden en que los avances sean muy lentos, “realmente yo me sentí un poco decepcionada de los líderes del planeta porque al final se están jugando la vida de todos” lamentó.
Sin embargo, pese a que experimentó frustraciones, las satisfacciones que le dejó su participación en Glasgow son mayores. Para Xitlali lo más emocionante fue interactuar con delegaciones de otros países, compartir con lideres y actores de diferentes partes del planeta. “La COP es una representación de lo que es la humanidad y es muy interesante tener la oportunidad de interactuar con gente de todas partes del mundo y de conocer la experiencia que ellos tienen” concluye Xitlali.